
Aprender a perdonar y olvidar
“Te perdono…” Una actitud que restaura mente, cuerpo y espíritu.
- ¿Cuánto te cuesta perdonar?
- ¿Por qué nos resulta tan difícil hacerlo?
- ¿Se puede perdonar sin sentirlo?
A lo largo de nuestra vida han podido hacernos daño de muchas formas. Los errores que han cometido otras personas han podido dejar una huella en nosotros difícil de superar.
Perdonamos en función del agravio y del dolor emocional que experimentamos; a más dolor y sufrimiento más difícil es perdonar.
Se dice que el tiempo todo lo cura, sin embargo las ofensas que no han sido perdonadas no sanarán nunca. El tiempo reduce la intensidad de emociones como la ira, rencor, victimismo; pero no las transforma en sentimientos de tranquilidad, paz y aceptación. No perdonar implica mantenerse en la postura de recordar lo sucedido y revivir una y otra vez el tiempo pasado, con todas las emociones negativas que nos hacen tanto daño y que no permiten avanzar.
Existe la creencia extendida que hay cosas que no se pueden, ni deben perdonarse, que eso te hace débil. Esta forma de pensar es errónea, pues solo te perjudica a ti. Tú eres el que sigues con el lastre del pasado y con todas sus consecuencias negativas para tu salud.
¿Cómo puedo perdonar si no lo siento?
7 Estrategias hacia el perdón:
- Toma la decisión perdonar. Para poder perdonar hay que tomar la decisión de querer hacerlo. No es algo que se siente es algo que se decide de forma voluntaria.
- Perdonar es lo que conviene a tu salud. Mantenerse aferrado al rencor solo ocasiona sensaciones físicas intensas y emociones dañinas, es un veneno constante.
- Es posible hacer algo que no sientes, tan solo es una cuestión de voluntad. Tu decides si quieres perdonar. Para dar el paso inicial no tienes que sentirlo. Solo toma la determinación de hacerlo. Decide vivir sin rencor, orgullo, e ira.
- Perdonar es pensar de forma diferente. Cambia los pensamientos de lo que “los demás deberían o no deberían haber hecho”, por otros como:”el/ella cometió un error, los seres humanos herimos y nos hieren”
- Perdonar no es quitar importancia a lo que sucedió, ni justificar al agresor, perdonar implica salir de la postura de sentirse una víctima, dejar de comportarse como tal.
- Perdonar implica decidir mantenerse olvidando; ¡Sí! cada vez que aparezcan recuerdos negativos decide no contemplarlos, simplemente recuerda que has decidido perdonar y pon en tu mente: “He decidido perdonar, mi pasado no marca mi presente ni mi futuro, si yo no lo permito”
- Mente, cuerpo y espíritu están conectados y cuando perdonas la sustitución de emociones negativas por positivas incidirá de forma asombrosa en tu salud física. Científicamente demostrado.“La salud mental se afecta a través de la continua vivencia de los hechos, es decir, de reproducir los pensamientos negativos y la rabia”. Un trabajo de Charlotte VanOyen Witliet del Hope College, lo confirmó.
¡Adelante! Decide perdonar y cambia tu vida.